Un lazo espiritual une al joven beato de la era digital con el nuevo Pontífice a través de la tierra peruana que ambos amaron
El nuevo Pastor de la Iglesia Universal
La columna de humo blanco sobre la Capilla Sixtina ha anunciado al mundo una nueva era para la Iglesia Católica. El cardenal Robert Francis Prevost, quien ha elegido el nombre de León XIV, se ha convertido en el 267º sucesor de Pedro y primer Papa estadounidense de la historia.
“¡La paz esté con todos ustedes! Queridísimos hermanos y hermanas, este es el primer saludo de Cristo Resucitado, el Buen Pastor que dio la vida por el rebaño de Dios. También yo quisiera que este saludo de paz entrara en sus corazones, llegara a sus familias, a todas las personas, dondequiera que estén, a todos los pueblos, a toda la tierra. ¡La paz esté con ustedes!”, fueron sus primeras palabras desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, estableciendo desde el inicio un pontificado orientado hacia la unidad y el diálogo.
Pero hay un aspecto menos conocido del nuevo Pontífice que merece nuestra atención: su profunda conexión con el Perú, específicamente con la Diócesis de Chiclayo, y cómo esta relación lo vincula indirectamente con el joven beato Carlo Acutis, quien se ha convertido en un modelo de santidad para la juventud del siglo XXI.
Un papá con corazón peruano
Nacido en Chicago, Estados Unidos, el ahora Papa León XIV de 69 años, llegó por primera vez a Perú en 1985, apenas tres años después de su ordenación sacerdotal. Lo que inicialmente fue una misión temporal se convirtió en un profundo compromiso con la tierra peruana cuando en 1988 regresó para dirigir el seminario agustiniano en Trujillo durante una década.
Su vínculo con Chiclayo se fortaleció en 2014, cuando el Papa Francisco lo nombró administrador apostólico de esta diócesis. Durante su tiempo como líder espiritual de Chiclayo, Prevost se ganó el cariño de la comunidad local, algo que recordó con emoción en su primer discurso como Papa:
” En modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe “.
Su trayectoria continuó ascendiendo cuando en 2023 fue creado cardenal por el Papa Francisco y designado prefecto del Dicasterio para los Obispos y presidente de la Pontificia Comisión para América Latina, cargos utilizados hasta su elección como Sumo Pontífice.
Carlo Acutis: El “influencer de Dios” en Chiclayo
Por otro lado, Carlo Acutis, el joven italiano beatificado en 2020 y conocido como el “influencer de Dios” por su habilidad para evangelizar a través de internet, ha establecido una presencia especial en la misma diócesis que tanto significó para el nuevo Papa.
En enero de 2025, apenas unos meses antes de la elección papal, las reliquias peregrinas de Carlo Acutis recorrieron la Diócesis de Chiclayo, siendo recibidas con extraordinaria devoción, especialmente en Ciudad Eten, donde se venera al Divino Niño del Milagro.
Como muestra del profundo impacto espiritual de esta visita, una reliquia de primer grado del beato Carlo permanece ahora de manera permanente en la Parroquia Santa María Magdalena de Ciudad Eten, convirtiéndose en un símbolo de fe y renovación espiritual, particularmente para los jóvenes de la región.
Un Año Eucarístico que une dos devociones
Esta conexión entre el beato Carlo Acutis y la diócesis tan querida por el Papa León XIV adquiere un significado aún más profundo en el contexto del “Año Eucarístico” que actualmente se celebra en la parroquia Santa María Magdalena de Eten.
Este Año Jubilar con indulgencia plenaria, que comenzó el 22 de julio de 2024 y culminará el 22 de julio de 2025, conmemora los 375 años del Milagro Eucarístico de Eten. No podemos olvidar que Carlo Acutis fue precisamente un extraordinario devoto de la Eucaristía, llegando incluso a catalogar los milagros eucarísticos alrededor del mundo a través de una exposición virtual.
La Parroquia Santa María Magdalena ha recibido miles de testimonios de milagros atribuidos al Divino Niño de El Milagro, muchos de los cuales han sido entregados oficialmente al Vaticano.
Un legado espiritual compartido.
Las palabras del nuevo Papa León XIV, ” Unamos nuestras manos a las de Dios y avanzamos juntos. Seamos discípulos de Cristo “, resuenan con el mensaje que Carlo Acutis transmitió a través de su corta pero impactante vida: la centralidad de la Eucaristía y el uso de los medios modernos para acercar a las personas a Cristo.
La presencia permanente de la reliquia de Carlo en Ciudad Eten, un lugar tan significativo para el Papa León XIV durante su ministerio episcopal, parece ser más que una coincidencia. Representa un puente espiritual entre un joven beato del siglo XXI y el nuevo líder de la Iglesia Católica, unidos por su amor a la Eucaristía y su compromiso con la evangelización.
Mientras el Papa León XIV comienza su pontificado llamándonos a “construir puentes”, podemos ver en esta conexión con Carlo Acutis y la Diócesis de Chiclayo un signo esperanzador: la Iglesia avanza uniendo tradición e innovación, experiencia y juventud, en un camino compartido hacia Cristo.
Publicado en UnPasoAlDia.com el 8 de mayo de 2025
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